Cuando las personas tienen trastornos hemorrágicos, su sangre no coagula como debería cuando tienen un sangrado externo o interno, lo que les lleva a sangrar más tiempo (aunque no más rápido) que alguien sin un trastorno hemorrágico.
Si bien es más difícil detectar la hemorragia interna que la hemorragia externa por cortes, hemorragias nasales o hemorragias bucales, es fundamental que las personas con trastornos hemorrágicos y los cuidadores conozcan los indicios y síntomas de las hemorragias internas, ya que es más probable que requieran atención médica de emergencia.
El reconocimiento rápido y el tratamiento adecuado de una hemorragia interna pueden limitar el daño duradero, reducir el dolor y disminuir la cantidad de tratamientos necesarios para controlar la hemorragia. Discuta con su equipo del centro de tratamiento de hemofilia (hemophilia treatment center, HTC) o con su profesional de la salud qué debe hacer en respuesta a cada una de las hemorragias a continuación.
Sangrado articular
La hemorragia interna en una articulación, especialmente en los tobillos, codos y rodillas, es el tipo de sangrado más común en personas con hemofilia. Las hemorragias articulares pueden ser causadas por una lesión, como torcerse un tobillo, golpearse un codo o caer sobre una rodilla, o pueden ocurrir espontáneamente. A medida que la sangre llena la cavidad articular, el aumento de la presión causa varios problemas.
Indicios y síntomas de las hemorragias articulares
• Hinchazón y piel más cálida alrededor de la articulación
• Sensación de hormigueo o burbujeo en la articulación
• Los padres pueden notar la renuencia de un niño a usar el brazo o la pierna afectados
• Movilidad articular limitada
• Dolor que generalmente empeora cuanto más tiempo pasa sin tratamiento del sangrado
Sangrado muscular
Las hemorragias en los músculos de los brazos, las piernas y la pelvis pueden ocurrir después de un traumatismo (por ejemplo, golpe en o torcedura del músculo, o debido a una inyección) o sin razón conocida. Las hemorragias musculares pueden causar una pérdida de sangre significativa dentro del cuerpo y ejercer presión sobre los nervios y los vasos sanguíneos, lo que puede provocar daños graves.
Indicios y síntomas de las hemorragias musculares
• Dolor o malestar en el músculo (el dolor en la cadera, ingle, estómago, glúteos o la parte baja de la espalda es un posible signo de sangrado del músculo pélvico)
• Tensión en el músculo incluso cuando no está en uso
• Hinchazón
• Piel caliente alrededor del sitio de sangrado
• Cojera
• Renuencia a usar un brazo o una pierna afectados
• Entumecimiento u hormigueo en la pierna o el brazo como si se hubiera “dormido”, como resultado de la presión sobre un nervio
• Las venas en los brazos o las piernas se ven más grandes de lo normal
Sangrado en la cabeza
El sangrado dentro y alrededor del cerebro puede ocurrir por un golpe en la cabeza o puede no tener una causa conocida. Debido a que este tipo de sangrado puede causar daño cerebral permanente o incluso la muerte, es crucial estar bien atentos a los signos de sangrado de la cabeza. Si usted o su hijo(a) experimentan una lesión leve en la cabeza (incluso leve), llame a su médico o HTC inmediatamente para preguntar qué medidas tomar. Para lesiones graves en la cabeza, llame al 911 y vaya a la sala de emergencias.
Indicios y síntomas del sangrado en la cabeza
• Dolor de cabeza prolongado
• Mareos
• Energía baja
• Dificultad para hablar
• Irritabilidad
• Dificultad para despertarse
• Visión doble o borrosa
• Dificultad para caminar derecho o tropiezos
• Inicio repentino de vómitos sin molestias estomacales
• Convulsiones
Hemorragia gastrointestinal
Afortunadamente, la hemorragia estomacal o intestinal no es común en personas con trastornos hemorrágicos. Sin embargo, puede ser un problema grave en el caso de que ocurriese. Si sospecha que usted o su hijo(a) tienen sangrado gastrointestinal, llame a su equipo de atención médica de inmediato para recibir instrucciones.
Indicios y síntomas de las hemorragias gastrointestinales (GI)
• Vomitar sangre fresca o sangre oscura que parece café molido
• Heces con sangre o negras como el alquitrán
• Dolor de panza
• Se ve pálido y se siente débil
• Sangrado del recto (esto puede ser causado por angiodisplasia, una condición en la cual los vasos sanguíneos en el estómago o los intestinos se agrandan y son propensos a sangrar. La angiodisplasia es más común en personas con enfermedad de von Willebrand que otros trastornos hemorrágicos)
Sangrado ocular
Las hemorragias dentro del ojo pueden ocurrir debido a una lesión en el ojo o sin razón conocida. Este tipo de sangrado es grave, ya que el sangrado prolongado detrás del globo ocular puede causar pérdida permanente de la visión. Llame al 911 o vaya a la sala de emergencias de inmediato si usted o su hijo(a) experimentan cualquiera de los siguientes signos y síntomas.
Indicios y síntomas del sangrado ocular
• Dolor o hinchazón en o alrededor del ojo
• Cambio de color dentro o alrededor del ojo (puede volverse rojo)
• Visión doble o borrosa o cualquier otro cambio en la visión
Sangrado de garganta
Las personas con hemofilia severa tienen mayor riesgo de sufrir este tipo de sangrado. Un sangrado en la garganta puede causar hinchazón que obstruye la tráquea. Llame al 911 de inmediato si nota cualquiera de los indicios y síntomas a continuación.
Indicios y síntomas del sangrado de garganta
• Hinchazón o decoloración de la piel del cuello
• Ahogo
• Dificultad para tragar o respirar
• Toser o vomitar sangre sin sangrar por la nariz o sangrar por la boca (la sangre tragada altera el estómago y puede causar vómitos)
• Cambio en el tono de voz