Los miembros de la comunidad de los trastornos hemorrágicos suelen lidiar con hemorragias pequeñas (y casi siempre cuentan con diversas formas de tratarlas por su cuenta). Pero algunas hemorragias requieren atención médica inmediata en función de la gravedad y la ubicación. Conocer la diferencia entre una hemorragia normal y una grave podría ser la diferencia entre la vida y la muerte. Después de todo, la causa principal de las muertes evitables por traumatismos es una hemorragia no controlada.
Aquí le presentamos lo que tiene que saber sobre la detección y la prevención de estas hemorragias peligrosas.
Síntomas de las hemorragias peligrosas
Para las personas con hemofilia, hay cinco lugares principales de hemorragias peligrosas que pueden poner en riesgo la vida o causar daños a largo plazo:
- Hemorragia intracraneal (en la cabeza)
- Hemorragia ocular (en el ojo)
- Hemorragia en la garganta o el cuello
- Hemorragia abdominal
- Hemorragia en la vejiga o los riñones
Estas hemorragias requieren que llame a su proveedor de atención médica, que reciba intervención inmediata o que acuda a la sala de emergencias. Además, se deben aumentar los niveles de factor en función del tratamiento recomendado de su equipo médico.
Hemorragia en la cabeza
Una hemorragia en el cerebro puede ocurrir después de una lesión en la cabeza o por otras causas desconocidas. Entre los síntomas visibles, se incluyen dolor de cabeza prolongado, vómitos, mareos, confusión, dificultad para hablar, sensibilidad a la luz brillante, pupilas dilatadas y convulsiones.
Hemorragia ocular
Las hemorragias oculares a menudo son el resultado de una lesión, enrojecen la parte blanca del ojo y causan visión doble o borrosa. También pueden causar dolor cuando se mueven los ojos. Si tiene estos síntomas, busque atención médica. Mientras tanto, colóquese una compresa de hielo en el ojo para detener la hemorragia y reducir la inflamación.
Hemorragia en la garganta
Las hemorragias que provienen de la boca pueden ser menores (por ejemplo, cuando se muerde la lengua o la mejilla), pero también pueden ser graves, puesto que pueden causar una inflamación que puede impedir respirar. Entre los síntomas de una hemorragia en la garganta se incluyen inflamación o decoloración del cuello, problemas para tragar o respirar, asfixia, tos o vómitos con sangre y cambio en el tono de voz.
Hemorragia abdominal
Las hemorragias estomacales o intestinales pueden ser graves. Es posible que tenga una hemorragia en el tubo digestivo si siente debilidad, tiene palidez, hace deposiciones oscuras o con sangre, tiene vómitos o tos con sangre, dolor abdominal o distención o rigidez abdominal.
Hemorragia en la vejiga o los riñones
Las hemorragias en las vías urinarias causan orina con sangre, la cual puede provenir de diversos lugares a lo largo de las vías urinarias, como los uréteres, la vejiga y la uretra. Preste atención a estos síntomas:
- Orina rosada, que puede ser una señal del inicio de una hemorragia de las vías urinarias.
- Orina roja o marrón, que puede ser una señal de una hemorragia en proceso o más grave.
- Lumbalgia.
- Micciones frecuentes.
- Dolor al orinar.
Llame a su centro de tratamiento de la hemofilia para averiguar cómo tratar una hemorragia en las vías urinarias, ya que el tratamiento adecuado depende de dónde esté la hemorragia.
Haga ejercicio con cuidado
Las hemorragias peligrosas suelen ser causadas por una lesión traumática, como las lesiones deportivas o los accidentes al andar en bicicleta. Si bien es importante hacer ejercicio, hay formas seguras de hacerlo para reducir el riesgo de tener lesiones graves.
Puede evitar los deportes de mucho contacto, como fútbol, boxeo, lucha libre o hockey, y optar por actividades de menor impacto, como andar en bicicleta, caminar, correr y nadar. Incluso en ejercicios de bajo impacto, asegúrese de usar el equipo de seguridad adecuado (por ejemplo, casco si anda en bicicleta).
Elimine los riesgos de lesiones en su casa
Otra forma de evitar lesiones es eliminar los peligros comunes en casa que podrían causar tropiezos y caídas, como umbrales elevados, tablas flojas y objetos desordenados en el suelo.