Si usted o su ser querido toman un medicamento para controlar un trastorno hemorrágico, es posible que ya sepa que debe considerar cuidadosamente qué otros medicamentos toma. Las interacciones farmacológicas pueden disminuir la eficacia de su factor de coagulación o, lo que es peor, diluir la sangre y ponerlo en riesgo de sangrado.
Consulte con su proveedor de atención médica antes de introducir algo nuevo y asegúrese de informar todos los medicamentos que está tomando, dice Jason Adam Wittes, Pharm.D., director de programas de farmacia en el Departamento de Medicina de la Universidad de Carolina del Norte.
Nunca asuma que algo es “inofensivo”, advierte Jonathan C. Roberts, M.D., director médico asociado del Instituto de Trastornos de la Coagulación y Sangrado en Peoria, Illinois.
Todo lo que introduce en su cuerpo es importante, así que eche un vistazo a estos recordatorios de interacciones farmacológicas potencialmente peligrosas para las personas con trastornos sanguíneos y hemorrágicos.
Evite los anticoagulantes
Los medicamentos anticoagulantes a menudo se recetan en respuesta a eventos cardíacos o para prevenir accidentes cerebrovasculares, ataques cardíacos o coágulos de sangre. Los ejemplos incluyen heparina, warfarina, Plavix y Xarelto. “Puede haber casos específicos en los que se indique la anticoagulación para una persona con un trastorno hemorrágico”, dice Roberts. “Estas decisiones deben tomarse después de una discusión exhaustiva con el hematólogo y el equipo interdisciplinario del paciente”.
Los AINE no son buenos
El ibuprofeno, el naproxeno y la aspirina son analgésicos que pueden disminuir el funcionamiento de las plaquetas,
Importancia de las vitaminas y los suplementos herbales
Algunas vitaminas y suplementos herbales podrían afectar el sistema de coagulación, dice Roberts, quien también tiene hemofilia. Sin embargo, sobre todo,
Tenga cuidado con los antidepresivos
Los ISRS (inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina), que se recetan frecuentemente para la depresión, son una clase de medicamentos que se sabe que afectan la función plaquetaria en algunas personas. “Uno debe sopesar los riesgos y beneficios del medicamento y determinar si podría complicar el manejo de su trastorno hemorrágico”, dice Roberts. En general, los ISRS se pueden usar de manera segura en personas con trastornos hemorrágicos, pero se debe monitorear a los pacientes para detectar hemorragias adicionales mientras usan estos medicamentos.
La importancia del almacenamiento y manipulación adecuados
Independientemente de los medicamentos que usted o su hijo estén tomando para un trastorno hemorrágico, siempre es buena idea revisar las mejores prácticas para guardarlos y manipularlos:
- Asegúrese de que su medicamento esté refrigerado, si es necesario. Si no tiene acceso a un refrigerador, comuníquese con su equipo de atención médica; puede ser elegible para recibir asistencia.
- Si no está seguro de las instrucciones para almacenar su producto, consulte el prospecto del producto o llame a su centro de tratamiento de hemofilia.
- Siempre utilice suministros limpios. ¿Tiene toallitas con alcohol para limpiar las ampollas? ¿Tienes suficientes objetos cortopunzantes? ¿Los está descartando en un contenedor resistente a roturas y a prueba de pérdidas?
Para obtener más información sobre el uso de AINE, consulte este documento del Consejo Asesor Médico y Científico de la NHF: hemophilia.org/MASAC276.