Olvídese de la noción tradicional de que las personas mayores casi no tienen relaciones sexuales. En la actualidad, los hombres y las mujeres mayores de 60 disfrutan de una vida sexualmente activa. Con la continuación de la actividad sexual en la vida adulta, ha habido un correspondiente aumento alarmante de enfermedades de transmisión sexual (ETS) e infecciones de transmisión sexual (ITS) en esta población.
Según datos de la compañía de tecnología de atención médica Athenahealth, de 2014 a 2017, "los índices de diagnósticos de herpes simple, gonorrea, sífilis, infección por clamidias, hepatitis B y tricomonosis aumentó un 23% en pacientes mayores de 60 años". (La infección por VIH no se incluyó en los datos).
Por qué debe prestar atención
Las ETS y las ITS son algo serio. Si no se diagnostican y se tratan, pueden causar determinados tipos de cáncer, verrugas y úlceras genitales, enfermedad inflamatoria pélvica, herpes y dolor pélvico crónico. Las personas con trastornos hemorrágicos deben prestar especial atención, dice Dana Francis, Máster en Trabajo Social (Master of Social Work, MSW), trabajadora social en el programa de hemofilia para adultos del Centro de Tratamiento de la Hemofilia de San Francisco de la Universidad de California.
“El sistema inmunitario de las personas mayores con trastornos hemorrágicos puede estar algo comprometido”, dice Francis. “No es solo a causa de la hepatitis C y el VIH/SIDA, sino también de utilizar un factor impuro hasta que se desarrollaron los factores recombinantes en la década de 1990. Su sistema inmunitario fue atacado la mayor parte de sus vidas. Por lo tanto, les puede costar un poco más combatir una ETS que a otra persona”.
Protéjase e infórmese
La prevención y la concientización son fundamentales para prevenir las ETS y las ITS, dice Beverly K. Johnson, PhD, Enfermera Titulada (Registered Nurse, RN), de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Seattle. En su artículo publicado en 2013 en Journal of Gerontological Nursing, Johnson recomienda lo siguiente:
Hable con su médico
Si piensa iniciar la actividad sexual o ya es sexualmente activo, hable con su médico sobre las medidas preventivas y las pruebas adecuadas. En la mayor parte de los casos, la Parte B de Medicare cubre las pruebas de detección de ITS con la remisión de un médico de atención primaria.
Comuníquese con su pareja
“Ambos trabajarán desde el conocimiento si saben la historia del otro y que opinan lo mismo sobre el uso de preservativo”, dice Johnson.
Use preservativo
Algunos hombres mayores no logran una erección suficiente como para que el preservativo quede puesto hasta la penetración, momento en el cual es demasiado tarde. Los medicamentos para la disfunción eréctil y las bombas de vacío pueden ayudar. De lo contrario, la mujer puede introducirse un preservativo femenino antes de la relación sexual.
Use lubricantes
Las mujeres deben utilizar humectantes y lubricantes vaginales para evitar que el preservativo se rompa durante la relación sexual. Debido a la disminución del estrógeno, las paredes vaginales se afinan, se secan y tienden a rasgarse.
Hágase una prueba de detección cada año
Al igual que en otras áreas de la salud, las pruebas de detección de ETS e ITS son la mejor forma de descubrir los problemas. Las mujeres sexualmente activas con una pareja nueva o con más de una pareja deben realizarse pruebas de detección de infección por clamidias y gonorrea. Los hombres sexualmente activos, incluidos los que tienen relaciones sexuales con hombres, deben realizarse pruebas de detección de sífilis, infección por clamidias, gonorrea y VIH.
Para obtener más información, visite estos recursos
Asociación Estadounidense de Salud Sexual
Instituto Nacional sobre el Envejecimiento