Como bien saben las personas con trastornos hemorrágicos, el invierno es una temporada difícil para la nariz. En varias partes del país, los climas fríos invernales suponen cambios de temperatura que varían entre el frío del exterior y la calefacción del interior; una combinación ideal para secar la nariz. Añada a eso las aspiraciones nasales del invierno y las narices congestionadas causadas por los resfriados propagados por el frío y la gripe, y tiene la receta para hemorragias nasales más frecuentes.
“En el invierno, la mayor causa de las hemorragias nasales es la poca humedad, tanto en el aire frío del exterior como en el de la calefacción del interior. Esto puede provocar que se seque y se agriete la delicada membrana que recubre las fosas nasales”, indica Consumer Reports. “Entonces, todo lo que se necesita es una tos, un estornudo, una uña afilada o soplar su nariz para que se rompan los pequeños vasos sanguíneos justo debajo de la superficie”.
A continuación, presentamos algunas sugerencias para prevenir las hemorragias nasales, así como consejos sobre qué hacer si tiene una.
Mantener las hemorragias nasales al mínimo
Para prevenir las hemorragias nasales causadas por el aire seco debe agregar más humedad al aire o humectar más su nariz.
- Utilice un humidificador en su habitación para lograr humedecer el aire y su membrana nasal mientras duerme.
- Utilice un rociador nasal de solución salina o un gel soluble en agua para aplicar en el interior de su nariz.
- Si está resfriado, límpiese suavemente en lugar de descongestionar su nariz con soplidos fuertes.
- No se rasque la nariz.
- Si ya tiene una hemorragia nasal, para no desencadenar una recurrencia evite actividades enérgicas como correr. Otras actividades también pueden hacer que su nariz empiece a sangrar nuevamente; incluyendo sumergirse en una piscina, agacharse durante un largo período de tiempo o comer comida picante.
Qué hacer si tiene una hemorragia nasal
Si a pesar de sus esfuerzos para humectar y evitar traumatismos innecesarios su nariz empieza a sangrar de nuevo, intente estas sugerencias:
- Inclínese hacia adelante para que la sangre no caiga hacia su garganta. Si tiene sangre en la boca, no la trague; escúpala.
- Sóplese suavemente la nariz.
- Después, apriete la parte blanda de su nariz para mantenerla cerrada durante 10 minutos. Si el sangrado no se detiene, repita este paso.
- Colocar una bolsa de hielo o una compresa fría sobre el puente de la nariz podría ser beneficioso.
La mayoría de las veces, las hemorragias nasales pueden ser tratadas en casa. Sin embargo, si tiene un sangrado nasal que no responde a la presión, que continua por más de una hora o si piensa que ha perdido mucha sangre, busque tratamiento. Si no está seguro de ir o no a la sala de emergencias (emergency room, ER), llame a su centro de tratamiento de hemofilia (Hemophilia Treatment Center, HTC). Si tiene hemorragias nasales frecuentes o está congestionado constantemente, hágaselo saber a su equipo de atención médica.
Más información: Descargue el HANDI Publication “Nosebleeds” en el sitio web de la Fundación Nacional de Hemofilia (National Hemophilia Foundation, NHF).